El dron transporta un desfibrilador, vuela a 100 km/h y puede llegar al lugar de los hechos en un minuto.
Casi a diario surgen nuevas aplicaciones para los drones. Hemos visto cómo pueden ser útiles para repartir correo, para analizar los huracanes en tiempo real, para inspeccionar puentes y otras infraestructuras de las ciudades y carreteras, para vigilar las malas hierbas en las cosechas, etc. Lo que no habíamos visto hasta ahora es que podrían ayudar a salvar vidas humanas.
Alec Momont, un estudiante de ingeniería de la Universidad Técnica de Delft, Holanda, ha creado un "dron-ambulancia" para ayudar en situaciones de emergencia médicas.
El dron-ambulancia vuela a 100 km/h, en línea recta y lleva un desfibrilador incorporado. Gracias a su GPS, localiza el lugar exacto en el que debe aterrizar; pero además, incorpora cámaras, altavoz y micrófonos para permitir, una vez que el dron llegue a donde esté el paciente, que el personal médico de instrucciones a las personas que están en el lugar.